Día 3.
Nos levantamos a las 8 de la mañana aunque como casi todos los días ya estaba despierto una hora o dos antes. Teníamos que estar en el muelle 33 a las 10’30h, para coger el Ferry que zarpaba a las 11h. hacia la isla de Alcatraz.
Cogimos he hicimos el recorrido habitual de estos días, no sin antes pasar por un Starbucks para desayunar, y ello consistía en ir por algunas de las calles que llegaban hasta Unión Square y luego subíamos por Grant cruzando Chinatown, hasta llegar a Columbus, en el barrio italiano y luego bajar por Powell hasta llegar al muelle 39 o Pier 39 como dicen los americanos y luego andar por la bahía un poco hasta llegar al muelle 33, que era desde donde salía el ferry para Alcatraz, ya que de todos los muelles salían ferrys para visitar la bahía y Alcatraz pero sin parar en la isla, y desde allí era el único sitio donde se cogían para ir exclusivamente a la isla.
Cogimos el Ferry y nos llevo ha alcatraz, en no mas de 5 o 10 minutos, nada mas llegar a la isla uno de los antiguos guardas que hacen de “guía” o de informadores en la isla explicaba mas o menos donde están las cosas, pero vamos era un Tour bastante por libre por la isla, lo interesante era cuando entrabas en la cárcel y mediante una guía vocal ibas recorriendo paso a paso todos los lugares de la prisión y te iban explicando su historia y la historia de los que allí habían estado y de cómo 3 presos se escaparon de la prisión, cuando todo el mundo pensaba que era una prisión de la cual no te podías escapar. Para mas casualidad el día que se escaparon, los tres presos, era el mismo en el que visitamos alcatraz el 11 de Junio, pero de hacia unos 50 años. La verdad la visita ha Alcatraz la considero muy recomendable para todo aquel que vaya a San Francisco.
Cuando regresamos a la bahía nos fuimos a comer ya que eran ya las 14’30h, y fuimos al Pier 39, que a parte de ser un muelle, reúne un centro comercial enorme que ocupa una gran extensión y el Aquarium de San Francisco, y dentro de este complejo fuimos a comer a The Crab House, la casa del cangrejo, donde me comí una de las mejores sopas de pescado que he comido nunca, además de abundante y después como no probé el cangrejo y la verdad ha sido la comida mas cara de este viaje pero vamos la que he pagado con mas gusto, ya que a parte de estar todo buenísimo, y el servicio ser excelente, teníamos unas vistas de la bahía inmejorables, vamos estábamos sobre el agua prácticamente.
Después del ágape nos fuimos a pasear por Fisherman’s Wharf zona inminentemente comercial y de ocio, y de allí hacia el hotel volviendo por nuestro recorrido habitual de Little Italy y Chinatown. Aquella tarde también estuvimos investigando como coger el Cable Car o el tranvía tirado por cable que es el típico de San Francisco.
Todo hay que decir que a estas alturas de la película ya estábamos un poco cansados del viaje en general y ya empezaba ha hacer mella en nosotros el cansancio, la cual cosa no quiere decir que no nos haya gustado San Francisco.
En una dimensión diferente
Bienvenidos a esta otra dimensión, donde las ideas y los pensamientos, van de la mano de experiencias vividas e historias de una ficción, de lo mas real.
domingo, 14 de junio de 2009
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